Carta a Henri Parisot, por Antonin Artaud

«Cuando recito un poema, no es para ser aplaudido sino para sentir los cuerpos de hombres y mujeres, he dicho los cuerpos, temblar y vibrar al unísono con el mío, virar como se vira de la obtusa contemplación del buda sentado, muslos instalados y sexo gratuito, al alma, es decir, a la materialización corporal y real de un ser integral de poesía»

Antonin Artaud, Carta a Henri Parisot